El miércoles pasado (15), la Iglesia de Brasa, en Rio Grande do Sul , inauguró un hotel para las familias que quedaron sin hogar tras las inundaciones en la región.
En Instagram, un voluntario informó la noticia: “Estamos muy contentos de compartirles esta noticia, es un sueño que tenemos desde el primer día que recibimos a personas sin hogar”.
En el refugio realizaron un evento de bingo para entregar regalos a las víctimas. Además, los voluntarios cristianos celebraron el cumpleaños de una señora llamada Juliana con pastel y felicitaciones.
“Sabemos lo importante que puede ser un momento de relajación en medio de todo lo que estamos pasando, por eso esta semana tuvimos una dinámica muy especial. Fue un privilegio para nosotros poder transmitir un momento de risa y alegría a todos”, informó la iglesia.
Acción humanitaria
En otra publicación, el pastor de la iglesia, Mauricio Martins, explicó que hace unos días hizo un llamado para recaudar fondos para alquilar una estructura hotelera y llevar allí a un grupo de niños.
“Un lugar donde estarían más protegidos y mejor atendidos”, afirmó.
Y continuó: “Ahora alquilamos esta estructura y ahorita van 24 familias, casi 100 personas que van a quedarse por 15 días”.
Desde el inicio de las inundaciones en el sur, la iglesia ha participado en acciones humanitarias para ayudar a las víctimas.
“Aún no tenemos idea del tamaño y número de familias que fueron afectadas por las inundaciones en nuestro Estado, pero estamos trabajando cada día más duro para restaurar lo perdido. Ya sea con un abrazo, una mano amiga, un refugio, seguimos firmes en la esperanza de días mejores y trabajaremos juntos para reconstruir historias”, declaró la iglesia en Instagram.
El pastor concluyó animando al público a seguir aportando: “Estamos ayudando a muchos niños, pero podemos ayudar a muchos otros con su generosidad”.